Se prevé que el dólar estadounidense registre su segundo trimestre consecutivo de ganancias, alcanzando un máximo de casi cuatro décadas frente al yen japonés. Este aumento se produce a pesar de una caída en los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a un día y de datos que muestran un sólido aumento en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Tokio.
Aspectos destacados del rendimiento
Según Jinshi, el yen ha caído un 6% frente al dólar este trimestre y un asombroso 12% en lo que va del año, lo que la convierte en la moneda de peor desempeño entre las naciones del G10. El euro también ha alcanzado un mínimo histórico frente al yen, lo que ilustra aún más el debilitamiento de la posición del yen.
Ray Attrill, jefe de estrategia de divisas del National Australia Bank, comentó: "En un entorno de baja volatilidad, el deseo del mercado por realizar operaciones de carry trade sigue siendo fuerte. Después de que el dólar estadounidense/yen japonés subiera por encima de 160 sin ninguna intervención, la aprensión del mercado parece haber disminuido. disminuyó significativamente."
Factores que influyen en la fortaleza del dólar
El principal impulsor del actual repunte del dólar es la anticipación de los datos clave de inflación de Estados Unidos, que podrían influir aún más en las decisiones políticas de la Reserva Federal. A pesar de una caída nocturna en los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense, el dólar atrae a inversores que buscan estabilidad en medio de incertidumbres globales.
Además, los sólidos indicadores económicos de Estados Unidos han reforzado la confianza en el dólar. Estos factores han compensado las preocupaciones que de otro modo podrían haber debilitado al dólar.
Las luchas del yen
El yen japonés ha enfrentado una presión sustancial, incapaz de ganar terreno frente al dólar a pesar de datos económicos internos positivos, como un aumento notable en el IPC de Tokio. La incesante depreciación del yen pone de relieve las condiciones económicas contrastantes entre Estados Unidos y Japón.
"La significativa caída del yen, particularmente frente al dólar, subraya los desafíos actuales que enfrenta la economía japonesa, a pesar de las cifras favorables del IPC", señaló Attrill.
Perspectiva del mercado
A medida que el dólar estadounidense continúa fortaleciéndose y el yen se debilita, es probable que los operadores mantengan su preferencia por las operaciones de carry trade. La resistencia del dólar y la caída del yen sugieren que estas tendencias pueden persistir, especialmente en un entorno de baja volatilidad.
La marcha del dólar estadounidense a un máximo de casi cuatro décadas frente al yen indica una confianza sostenida en la fortaleza del dólar, impulsada por indicadores económicos favorables y la anticipación de datos clave de inflación. Mientras tanto, la persistente caída del yen resalta los desafíos dentro del panorama económico de Japón.